La “Bolsa del Sello”
Bolsa del Sello nació a finales de los años sesenta, cuando María Ignacia Areyzaga, una exalumna de San Sebastián, España, era la presidenta de AMASC.
AMASC fue fundada oficialmente en mayo de 1965, en Bruselas, Bélgica, en una reunión de los Presidentes Nacionales de las Asociaciones de Antiguos Alumnas del Sagrado Corazón.
En 1966 se celebró en Roma el Primer Consejo Internacional. Se votaron y aprobaron los reglamentos internos de AMASC y el equipo existente vio su mandato prolongado hasta octubre de 1967, fecha en que el Segundo Consejo Internacional debía elegir un nuevo equipo.
La trágica muerte de la primera Presidenta de AMASC, la Baronesa Coppée, en febrero de 1967, no interrumpió los preparativos y su equipo convocó el Segundo Consejo Internacional en octubre de 1967, tal como se había acordado.
Este Consejo, celebrado en octubre de 1967, vio la elección de María Ignacia Areyzaga como Presidenta de AMASC, y la sede del Comité Ejecutivo de AMASC se trasladó de Bruselas a Madrid, España.
María Ignacia impulsó la creación de la Bolsa del Sello y una miembro de su equipo, Maribel Barreiro, alumna de Bilbao, España, asumió la responsabilidad del liderazgo del trabajo y dirigió su equipo durante muchos años con gran dedicación y generosidad.
En el Boletín de AMASC de 1971 leemos: “En la sede de la Asociación en Bilbao (Gran Vía, 7) la Bolsa del Sellocontinúa su labor, pero ahora a nivel internacional. Además de Roma, que siempre nos envía sus sellos, este año París y Nueva Zelanda también han enviado los suyos. Gracias a la colaboración de todos nuestros amigos seguimos trabajando sin parar y, de esta forma, hemos recaudado 103.325,59 pesetas…” (aprox. 850 USD).[1]
La sede principal de la Bolsa del Sello en Bilbao empezó a recibir sellos cancelados de todos los países de AMASC. El trabajo del equipo consiste en clasificarlos y limpiarlos, para luego comercializarlos. El dinero recaudado se envía al presidente de AMASC para permitir que representantes de exalumnas de países en desarrollo pueden asistir y participar en los Congresos Mundiales de AMASC.
La Bolsa del Sello ha llevado a cabo su trabajo durante muchos años, con la misma energía y con el mismo propósito. Hoy continúa gracias al esfuerzo de innumerables alumnas.
En 1990, con la inauguración de la “Residencia Santa Filipina” en Madrid, gestionada por la Fundación ASCE, entre las actividades puestas en marcha para los residentes se encontraba otra Bolsa del Sello. Una de las nuevas residentes, Lourdes Pombo, alumna de Sagrado Corazón Bilbao, con la ayuda de otros residentes y alumnas voluntarias, se encargó del trabajo. Prepararon los sellos y luego los enviaron a la oficina de Bilbao.
Maribel Barreiro visitó la Residencia en varias ocasiones, felicitándolos y animándolos en su trabajo. Cuando murió Lourdes, su sucesora fue Carola Álvarez Arenas, Alumna de Chamartín (Madrid), y durante muchos años dirigió a su equipo con gran eficacia y dedicación desinteresada.
Fue en este momento cuando Maribel Barreiro, después de muchos años dirigiendo la Bolsa del Sello de AMASC, solicitó a la Asociación Chamartín que se hiciera cargo de la sede principal. Aceptaron y Carola asumió el trabajo de Maribel. Empezaron a llegar sellos de muchos países de AMASC enviando sus paquetes a Madrid en lugar de a Bilbao.
En 2012, la oficina de la Bolsa del Sello estaba en la Asociación de Antiguas Alumnas de Chamartín en Madrid y estaba dirigida por Luisa Martín-Cobos, alumna tanto de Palma de Mallorca como de Chamartín. Carola se quedó del equipo. Siguieron recibiendo sellos usados de las Asociaciones de Antiguas Alumnas de España (ASCE) y de todos los países que forman parte de la asociación mundial (AMASC), continuando con su labor ejemplar.[1]
El número de sellos siguió creciendo y los fondos generados aumentaron. Aunque la participación se disminuyó considerablemente durante la pandemia de coronavirus que comenzó en 2020, a principios de 2023, nuestra familia ASCE envió a AMASC 700 €.
El dinero recaudado a través de la Bolsa de Sello sigue enviándose al Presidente Nacional de ASCE, quien lo remite a AMASC para que pueda ser utilizado para financiar la participación de alumnas de países en desarrollo en los Congresos Mundiales de AMASC.
AMASC agradece a la Asociación de Antiguos Alumnos de España por este maravilloso trabajo. Animamos a las asociaciones de todo el mundo a seguir coleccionando y enviando muchos sellos usados a la Bolsa.[2]
Enviar los sellos cancelados (excepto durante los meses de julio y agosto) a:
Colegio Sagrado Corazón Rosales
Att. Pilar Grassa
Calle Ferraz, 63
28008 MADRID
[1] Información suministrada en 2012 por María Jesús Ubarrechena, Presidenta de la AASC San Sebastián quien, como miembro del comité de María Ignacia Areyzaga, editó la revista AMASC durante dicha Presidencia.
[2] Gracias a María Victoria Beruete, que recopiló esta historia en octubre de 2012
[3] Actualización julio de 2023 por Marie Therese Sebrechts, Tesorera del AMASC
